Los hinchas ingleses suspiraron tranquilos al saber que el delantero Wayne Rooney no necesitará más de cuatro semanas de recuperación para su lesion y podrá jugar el Mundial de Sudáfrica 2010, según anunció 'Skysports'. No sonríen tanto los hinchas del United, y mucho menos su entrenador, Alex Ferguson, más preocupado por la Premier y la Liga de Campeones.
Rooney se torció el tobillo derecho el martes por la noche en el último minuto del encuentro de la Liga de Campeones entre el Bayern Múnich y el Manchester United, generando temor en Inglaterra por su presencia en la próxima Copa del Mundo.
Después de las pruebas médicas a las que sometió el club a su delantero estrella, la cadena británica aseguró que sólo padece un esguince de tobillo y que la recuperación demandará entre dos y cuatro semanas. Está previsto que el seleccionador de Inglaterra, el italiano Fabio Capello, se ponga en contacto con el United en las próximas 24 horas para saber de primera mano el alcance de la lesión. El Mundial comenzará el 11 de junio.
Rooney sí se perderá el trascendental partido del sábado ante el Chelsea, en el que posiblemente se decida quién será el campeón de la liga inglesa al jugar primero y segundo a falta de seis fechas para terminar. Tampoco estará el miércoles de la semana próxima en el choque de vuelta con el Bayern en Old Trafford.
Cuando Rooney se fue al suelo en un encontronazo con el delantero del Bayern Mario Gómez y se echó las manos al tobillo con síntomas de gran dolor, Inglaterra entera se estremeció. Precisamente, fue la jugada del segundo gol, el que dio la victoria al conjunto bávaro. El delantero abandonó el campo ayudado por los servicios médicos del United, se quitó la bota y se retorció de dolor en la banda.
Toda Inglaterra recordó el momento en el que el delantero del Mersey sufrió una grave lesión en el Mundial de Alemania de 2006. Nada más comenzar la fase de grupos el internacional inglés se rompió el metatarso del pie y tuvo que abandonar la cita de nuevo en muletas. Capello ya ha perdido ha uno de sus jugadores. Beckham se rompió hace unas semanas el tendón de Aquiles en un partido con el Milan y no estará disponible para el seleccionador, pero la baja del punta hubiera sido fatídica para las aspiraciones inglesas en Sudáfrica.
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